El conjunto grancanario sumó su tercera Copa del Rey consecutiva imponiéndose por 4-1 al vigente campeón de la Liga Élite, CPLV Caja Rural en la gran final (4-1). Jacob Tenemyr con 3 goles en la gran final que designado como el gran MVP del torneo
El Palacio de los Deportes de Cartagena acogía la gran final del torneo del KO entre los dos grandes dominadores del hockey línea de los últimos años. Por una parte el CH Molina Sport se presentaba en la cita para defender sus dos coronas en el torneo del KO logradas de manera consecutiva en las dos ediciones anteriores; mientras que enfrente se situaba el vigente campeón de la Liga Élite y de la Supercopa de España.
Los grancanarios llegaban con la moral por las nubes, pero con el cansancio acumulado de haber jugado en el día de ayer dos eliminatorias ante CHC Las Rozas en cuartos de final y con Tres Cantos en semifinales, esta última con prórroga incluida; mientras que los pucelanos como cabezas de serie lo hacían con un solo partido a sus espaldas, en semifinales ante el Espanya HC.
CH Molina Sport golpea primero
Imagen de Luis Velasco (RFEP)
El choque no podía empezar de la mejor manera para los grancanarios que veían como una genialidad por el flanco izquierdo de Jacob Tenemyr terminaba con un remate mortal del sueco que adelantaba al vigente campeón a los 30 segundos de partido (1-0).
El Molina intentaba aprovechar el desconcierto inicial de los pucelanos que salvaban los muebles gracias a una gran intervención de Javier Tordera y al palo derecho de la meta vallisoletana que impedían que el segundo gol canario subiese al marcador en un inicio trepidante de partido.
CPLV se veía obligado a perseguir la pastilla que estaba la mayor parte del tiempo en los sticks de los amarillos, que ponían cerco a la portería de Tordera, buscando ampliar su renta en un partido que se presumía largo y competido, consiguiendo duplicarla a pesar de sufrir su primera inferioridad en el choque, gracias a un poderoso latigazo por la escuadra de Edu Cabalin tras recibir una asistencia de Andreu Tomàs, que colocaba el 2-0 en el electrónico a 13 minutos del descanso, optando Olmo Ercilla por solicitar su primer tiempo muerto en el partido para recomponer a su equipo.
Las consignas del entrenador de CPLV daban el resultado deseado por los vallisoletanos que recortaban diferencias en una gran asistencia de Mario Díez que aprovechaba Marcos Pérez para sorprender a Vili Virta y colocar el 2-1 en el electrónico a 12 minutos del descanso.
Imagen de Luis Velasco (RFEP)
Chuck Baldwin ponía a prueba a Tordera en un mano a mano que se resolvía en favor del buen cancerbero pucelano que mantenía inalterable el marcador, al tiempo que sus compañeros buscaban eludir la buena presión de los amarillos para intentar igualar la contienda.
La intensidad crecía con el paso de los minutos en un ida y vuelta en el que el trabajo se le multiplicaba a los defensas, con un Molina con mayor presencia en las inmediaciones del área pucelana, aprovechando su primer power play en el partido para aumentar su renta a favor con un misil tierra aire de Tenemyr, asistido magistralmente por Chuck Baldwin, que colocaba el 3-1 a 5 minutos para el descanso del choque.
Vili Virta cerraba las puertas ante los intentos de respuesta de los vallisoletanos, mientras Molina mantenía la intensidad en busca de aumentar la renta ante un CPLV capaz de remontar los resultados más adversos y que vaciaba su portería aprovechando la superioridad por la sanción a Kevin Mooney para intentar recortar diferencias en la recta final de una primera mitad, en la que el guardameta finés se mostraba inexpugnable para llegar al ecuador del choque con el consabido 3-1 en el electrónico.
Dominio total de un CH Molina Sport que repite título
Imagen de Luis Velasco (RFEP)
CPLV salía a por todas en el arranque de la segunda mitad buscando aprovechar los últimos segundos sin la presencia de Mooney en pista, pero era el Molina quien volvía a marcar diferencias a través del killer sueco Jacob Tenemyr, que aguantaba con la frialdad de un asesino silencioso ante Tordera, que no podía evitar que el 4-1 subiera al electrónico con el norteamericano de regreso al terreno de juego.
El CH Molina Sport seguía con su plan de partido inalterable dominando el escenario ante un CPLV que no daba con la tecla para igualar la propuesta ofensiva de los canarios, que no se conformaban con los 3 goles de ventaja en el marcador.
Valladolid apretaba los dientes, pero era el cuadro grancanario el que seguía disfrutando de más opciones en la portería rival, con un juego virtuoso y ofensivo que se le atragantaba a los pucelanos, en un choque vibrante que entraba en sus últimos 10 minutos con un nuevo power play en favor de CPLV tras ser sancionado Andreu Tomàs.
Imagen de Luis Velasco (RFEP)
El larguero de la meta de Vili Virta evitaba el gol el un gran lanzamiento de Dani Díez evitando que los pucelanos se acercasen en el electrónico, recuperando el Molina la igualdad de efectivos en pista sin sufrir daños en su portería.
El partido entraba en su recta final con el tiempo jugando en favor de los canarios que no hacían concesiones a los hombres de negro que vaciaban su portería a la desesperada en busca de una remontada que finalmente no llegaría, confirmándose un triplete histórico para los canarios, que hacían además historia siendo la primera vez con el actual formato de la Copa del Rey que un tercer clasificado en la temporada regular se convertía en campeón del torneo del KO.
Ficha del partido
Encuentro correspondiente a la final de la Copa SM El Rey celebrada en el Palacio de los Deportes de Cartagena.
Árbitros: Alba Louise Calero Scanlan y Alejandro García Baños
Goles: 1-0, Jacob Tenemyr; 2-0, Edu Cabalin; 2-1, Marcos Pérez; 3-1, Jacob Tenemyr; 4-1, Jacob Tenemyr
CH MOLINA SPORT (4): Vili-Valeri Virta (P) y David González (PS); Pawel Zasadny, Eduard Cabalin (1G), Jan Andrysek, Jacob Tenemyr (3G), Chuck Baldwin (1A), Andreu Tomàs (1A), Erik Alfaro, Iván de las Heras, Carlos Azofra y Kevin Mooney
CPLV CAJA RURAL (1): Javier Tordera (P) y Raúl Aymerich (PS); Andrés Baños, Daniel Díez, Pablo Sierra, Pablo Tribiño, Andrés Esgueva, Carlos Cabrera, Adel Saber, Marcos Pérez (1G), Miguel de Saja, Eloy Valls, Mario Díez (1A) y Olmo Ercilla
Valoración de Andreu Tomàs
«Me siento destruido físicamente después de tener que afrontar estos tres partidos tan intensos en dos días de competición».
«Este año la función principal como entrenador la desarrolla Jacob Tenemyr y entre los dos, junto al resto del equipo, vamos pensando y hablando como jugar, decidimos las alineaciones y al final es un trabajo de equipo, en el que nadie tiene el mérito individual, sino que todos tenemos nuestra cuota de participación y todos somos responsables de un éxito como el de hoy».
«A la afición la hemos echado de menos estos dos días, porque es un público que siempre lo da todo en todos los partidos apoyándonos y se nota que lo sienten, son ellos los que nos dan esta motivación que necesitamos para poder ganar los partidos».