Los amarillos hicieron un gran partido tras ver cómo se retrasaba su vuelo y cómo tenían que llegar demasiado justos para enfrentarse con un CPLV Caja Rural que se llevó la victoria en la tanda de penaltis (3-3 / 3-2). El cuadro grancanario demostró carácter y fe ante el líder de la liga para traerse un punto que puede ser importante
Un punto que puede valer mucho. El CH Molina Sport Gran Canaria cayó en la tanda de penaltis ante el CPLV Caja Rural después de hacer un gran partido y, sobre todo, un gran esfuerzo. Los amarillos llegaron demasiado tarde a Madrid tras un retraso importante en su vuelo e hicieron carretera hasta Valladolid para poder jugar. Pese a la paliza que supone el viaje, el conjunto insular dio la talla y se llevó 1 punto para su casillero que, a la larga, podría ser decisivo para la pelea por la Liga.
Un duelo de tensión creciente e igualado
El partido se inició con mucha igualdad, aunque el Molina Sport fue capaz de ser un poco más incisivo al principio. En ese sentido, los amarillos llevaron la voz cantante del juego con un Chuck Baldwin especialmente activo. Con el paso de los minutos, ambos equipos fueron acercándose con peligro a ambas porterías, aunque ninguno parecía estar todavía fino para abrir el electrónico.
No obstante, a los 7 minutos de juego una buena conexión entre Mooney y Jan Andrysek le dio al Molina el primer tanto del partido. El checo le dio aire a los insulares en una pista y ante un rival complicado (0-1). La concentración de los canarios les dio la oportunidad de adelantarse y no se dejaron ir ni mucho menos, estando bastante más enteros que un CPLV Caja Rural algo frío aún.
La expulsión de Cabalín desprotegió un poco a un Molina que vio como el CPLV logró el empate. Marcos Pérez hizo el tanto de la igualada a 11 minutos del final de una primera parte en la que se notó la tensión según se fue acercando el descanso (1-1). De hecho, hubo varias expulsiones y los isleños no fueron capaces de sacar partido cuando tuvo esa superioridad numérica.
Por esa razón, el descanso apareció con un empate que reflejaba la igualdad que se estaba viviendo en un Polideportivo Canterac de Valladolid ardiente.
Intercambio de goles para abrir la prórroga
Tras el receso, Molina y CPLV volvieron a igualar fuerzas en prácticamente todo. Mismos disparos, mismos acercamientos y nadie fue capaz de cambiar el guion. A partir de ahí, el primero que diera un golpe sobre la mesa podía ganar mucho terreno. No obstante, los dos porteros estuvieron muy atentos para evitar sustos innecesarios. Había que seguir picando piedra para poder marcar.
El primero en dar con la tecla fue el Molina, porque Iván de las Heras perforó la meta pucelana y puso por delante a los amarillos (2-1). Pese a ello, la alegría duró poco porque Eloy Valls puso la igualada rápidamente (2-2). Después de unos minutos de tanteo, Jacob Tenemyr hizo honor a su fama para devolver la ventaja al conjunto visitante a poco más de 11 minutos del bocinazo final (2-3).
Sin embargo, en una contra Andrés Esgueva puso la igualada y abrió de nuevo el encuentro a 8 minutos de acabar (3-3). El final fue muy igualado, aunque el Molina fue capaz de aguantarla una inferioridad numérica en un momento muy decisivo, por lo que la prórroga apareció. Los amarillos tenían que remar más.
El Molina fue mejor durante la mayoría de los 5 minutos de la prórroga. Las ocasiones de los insulares fueron mejores, más constantes. Además, el CPLV tuvo que sufrir una nueva inferioridad numérica que llevó a los grancanarios a tirar con todo para intentar marcar el gol decisivo que cambiase el partido (3-3).
Honores para un Molina que cedió en los penaltis
Una vez llegados a la tanda de penaltis, tanto Esgueva como Baldwin anotaron los primeros lanzamientos de los dos equipos. Aun así, tanto pucelanos como canarios erraron sus siguientes 4 tiros. Posteriormente, Kevin Mooney anotó el suyo y CPLV, que estaba contra las cuerdas anotó el suyo gracias a Andrés Baños, dejado todo en el aire todavía con lo decisivo de cada disparo (2-2).
Asimismo, tras 5 fallos por equipo, Erik Alfaro erró el sexto para el Molina y, esta vez, CPLV sí que lo aprovechó de la mano de un Andrés Baños que le dio 2 puntos a los vallisoletanos, dejando al Molina con 1 punto que puede ser de oro (3-2).
Pese a la derrota, el Molina puede estar orgulloso. Después de quedarse tirados en el aeropuerto debido a un retraso en el vuelo y tener que viajar a toda velocidad de Madrid a Valladolid para poder jugar el partido con la hora justa, los amarillos dieron la cara ante el líder de la Liga Élite. Los canarios hicieron un gran partido y merecieron algo más. Toca levantar la cabeza porque se compitió al máximo.
Ficha técnica del partido
Encuentro correspondiente a la sexta jornada de la Liga Élite 201/2022 celebrado en el Polideportivo Canterac de Valladolid
Árbitros: David Cañas Peña y María Rosa Barajas Pérez
Goles: 0-1, Jan Andrysek; 1-1, Marcos Pérez; 1-2, Iván de las Heras; 2-2, Eloy Valls; 2-3, Jacob Tenemyr y 3-3, Andrés Esgueva.
Penaltis:
CPLV CAJA RURAL (3) – (3): Raúl Aymerich (P) y Javi Tordera (PS); Andrés Baños, Dani Díez, Pablo Sierra, Pablo Tribiño, Andrés Esgueva (1 gol), Carlos Cabrera (1 asistencia), Miguel Rubia, Marcos Pérez (1 gol), De Saja, Rubén Sinovas, Nico Díez, Eloy Valls (1 gol), Mario Díez (1 asistencia) y Olmo Ercilla.
CH MOLINA SPORT (3) – (2): Vili-Valeri Virta (P) y David Hernández (PS); Pawel Zasadny, Eduard Cabalín (1 asistencia), Jacob Tenemyr (1 gol), Chuck Baldwin, Kevin Mooney (1 asistencia), Andreu Tomàs, Iván de las Heras (1 gol), Erik Alfaro, Carlos Azofra y Jan Andrysek (1 gol).
